Arturo Prat en el Trabajo
“Muchachos, la contienda es desigual, nunca nuestra bandera se ha arriado ante el enemigo, espero que esta no sea la ocasión de hacerlo. Mientras yo viva esa bandera flameará en su lugar y si yo muero, mis oficiales sabrán cumplir con su deber”
Esta frase que todos conocemos desde niños y que ha sido orgullo patrio por generaciones, inspirando desfiles, películas y series, composiciones, tareas y collages de colegio, vestimenta e interpretaciones en actos escolares, entre otras cosas, ahora me viene a la mente para poder analizarla desde un punto de vista laboral.
¡¡¡¿Laboral?!!!, ¡¡¡¿cómo vamos a poner la arenga de Arturo Prat en el ambiente Laboral?!!!... Sí, se puede…
Tenemos que verla desde las siguientes aristas:
· El afrontar las dificultades, pararse frente a aquellas tareas difíciles, que no conocemos a cabalidad, que no tenemos todas las competencias desarrolladas y saber podemos realizarlas si tenemos el autoconocimiento de nuestras limitantes y la humildad para pedir ayuda, para reconocer que, en algunos casos, no podemos caminar solos, y eso no nos minimiza, al contrario, la persona se engrandece cuando reconoce sus fallas, se apunta al crecimiento y a la automotivación por mejorar.
· El trabajo en equipo: una batalla no se gana estando solo, una batalla no se lucha de manera descoordinada. Se necesita un equipo trabajando en conjunto para llevar a cabo las tareas, lo que yo no sé o no puedo hacer, lo hará mi compañero y, además, existe la confianza en ellos. En el fulgor de la batalla no hay tiempo de revisar si otro lo hizo bien, se confía, se apoyan unos a otros.
· Liderar con el ejemplo: Prat no se quedó en su camarote o en su sala de reuniones dando órdenes. Un líder no sólo da las indicaciones y directrices acerca de la gestión a realizar, un líder anima, motiva, y un gran líder, trabaja en conjunto con su equipo, a veces incluso más que ellos, para lograr los resultados.
Entonces, los insto a ser Arturos en sus trabajos, con sus equipos, con sus tareas… llevemos nuestra Esmeralda a la victoria y a que siempre se mantenga a flote, avanzando y triunfando.